¿Cómo elegir tu colchón?
Los expertos coinciden en que dormir bien es una de las mejores maneras de mantener y mejorar nuestra salud física y mental. El colchón en el que dormimos todas las noches es un factor muy importante para este buen dormir, pero muchas personas pasan por alto su importancia y siguen usando un colchón que no ofrece el soporte y la comodidad suficiente.
En primer lugar, es fundamental asegurarse que tu columna permanezca alineada al acostarte. Tu posición para dormir, tu tipo de cuerpo y tus preferencias personales en cuanto a la sensación y los materiales jugarán un papel importante a la hora de determinar qué colchón es tu mejor elección.
También debes tener en cuenta cualquier problema relacionado con el sueño, es decir, si sufrís de calor por la noche, tenés dolor de espalda o te despierta tu pareja, hay un colchón específico para vos. Vamos a analizar estos temas para ayudarte a decidir que colchón llevar a casa.
1. Considerá tu posición al dormir
Al recostarnos, es fundamental un buen apoyo del cuerpo para mantener la alineación de la columna. Por este motivo, elegir un colchón que se adapte a tu posición al dormir puede aumentar la comodidad y ayudar a evitar dolores y molestias.
-Boca arriba: Las personas que duermen boca arriba ejercen la mayor presión sobre la zona lumbar. Con un colchón demasiado blando, el torso puede hundirse más que la parte superior de la espalda y la parte inferior del cuerpo, y esta forma de U puede generar tensión. Con un colchón demasiado firme, no habrá ninguna adaptación a la ligera curvatura de la zona lumbar. Es por eso, que se recomienda un colchón de firmeza media a firme para mantener la alineación de la columna.
-De lado: En este caso, se necesita un colchón de firmeza media a media blanda que alivie la presión en las zonas de los hombros y caderas. En un colchón demasiado blando estos puntos se pueden desalinear, mientras que, en uno demasiado firme, se sentirá el impacto en estos puntos y también serán propensos a desalinear la columna.
-Boca abajo: En esta posición, al igual que quienes duermen boca arriba, se suele ejercer la mayor presión sobre la columna lumbar por lo que lo mejor es un colchón firme que evite que el cuerpo adopte una forma de U y así esforzar la columna.
2. Elegí los materiales de tu colchón
Si recién estás comenzando a buscar un colchón nuevo, probablemente hayas notado que la cantidad de opciones puede ser abrumadora. Una forma útil de orientarte es comenzar pensando en los tipos de colchón y luego evaluar el que se adapte mejor a tus preferencias y estilo de vida.
- Resortes: Son ideales para quienes buscan soporte, durabilidad y ventilación. Los colchones con resortes pocket reducen la transferencia de movimiento, lo que los hace perfectos para parejas.
- Espuma: Estos colchones están fabricados completamente con espuma. Suelen adaptarse muy bien al cuerpo, aliviando la presión y aislando el movimiento, lo que los convierte en una buena opción para quienes duermen de lado y para parejas. Entre las espumas que se utilizan en estos colchones, la espuma viscoelástica es la más conocida.